“Si esperas un pollo, te darán un hueso en un tazón con agua caliente, a lo que considerarán sopa. Luego firmarás en el registro de asistencia, para que te den como postre un chicle. Así al salir del comedor social, la gente de bien te verá masticando y pensarán que esa noche podrán dormir tranquilo, pues con sus donaciones e impuestos, tu estómago no protestará en el resto del día, debido a tan espléndida comilona.”
Sir Crogan Heavy Belly (1851- 1912), fundador de los comedores sociales del norte de Londres, donde cientos de mendigos y ancianos acudían hambrientos, para luego salir farfullando imprecaciones celestiales de nulo agradecimiento.
¡Y no digamos lo necesarios que son en
plena epidemia Zombi!
Robert, me reservas un par de costillas.Un fuerte abrazo.
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¡¡Comedor social para zombies!! Claro, con esas pintas de zarrapastrosos, como no lo iban a necesitar
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¡Pues claro que sí! los zombies también tienen derecho a comer. Muchas gracias por el jabalí, el koala psicótico lo bajo solito del camión sin problema alguno.
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Ese tipo se ve apetitoso y mas porque tuvo un virus infeccioso, jummmy.
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¡Hola, LoboViejoVerde! ¡No sólo un par de costilla, sino que una pierna entera que te envío! Eso si, me tienes que indicar si prefieres el miembro inferior izquierdo o el derecho, je je.Recibe un fuerte abrazo, compañero. Y la sonrisa malvada de oreja a oreja. 🙂
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A que ha sido una buena ocurrencia, Nerea. El problema es que nos hemos quedado sin personal. Si quieres, tienes un hueco como pinche. Pero ven con un lanzallamas para mantener apartados a los comensales de tus cercanías. 🙂
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Esto, Nocivo… ¿Cuándo perdió usted la condición de llevar el Señor por delante? ¡No me diga que está en la ruina! ¡Que la crisis le ha convertido en un simple ciudadano a pie sin título nobiliario que lucir en la pared del despacho! Si es así, mejor que racione la comida, y que el jabalí le dure por lo menos medio año…Si no veo que acabará metiendo en el micoondas al pobre koala. 🙂
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Je, je, BELLARTE. Aparte de delicioso, el hombrecillo está soltero y sin compromiso. La pena es que ya es un poco tarde para que pueda chatear contigo a la luz de las velas, ja ja. 🙂
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